COACHING
Y LIDERAZGO PERSONAL PARA EL DESARROLLO HUMANO
Autor: Cerbeleón
Murillo Ruiz
Año: 2015
RESUMEN
Este
artículo tiene como propósito fundamental, explicar la importancia del coaching
como arte o disciplina para el enriquecimiento y fortalecimiento del potencial
del ser humano, y que mediante el uso del liderazgo personal, entendido este
como la capacidad que tiene una persona para dirigir responsablemente su
desarrollo personal, le permite tomar las decisiones más acertadas para mejorar
su desempeño ay alcanzar las metas. Se ofrece además la relación del coaching y
el liderazgo personal como enfoques que tributan al logro del desarrollo humano
para una mejor calidad de vida. Bajo esta premisa se asume el coaching desde
una visión integral, integradora, a través de la cual la persona desarrolla la
consciencia en las dimensiones personales fundamentales: Emocional, Mental
(Racional), Lingüística, Energética, Corporal y Espiritual (Cuántica): al
tiempo que permite la preservación y la conexión con el espacio de aprendizaje
personal. Como quiera que la persona no conoce lo que no puede ver, el coaching
se constituye en un gran estímulo que apoya el autoconocimiento permitiéndole
al coachee o coacheado mejorar sus fortalezas así como sus áreas de oportunidad.
En este sentido, tanto el coach como el proceso de coaching adquieren gran
importancia, ello debido a que no es suficiente conocer la situación que afecta
al cochee, sino que es necesario brindarle las herramientas para que se
empodere y tome el centro de su vida. En este mismo orden el liderazgo personal cobra
muchísima importancia toda vez que va de la mano de la toma de decisión, la
confianza, la seguridad y la asertividad, es decir, el liderazgo de nosotros a
nosotros mismos, por cuanto requerimos tomar el control de nuestra vida
actuando con autonomía y asertividad.
Descriptores: Coaching, coaching
integral, liderazgo personal, desarrollo humano, calidad de vida.
PERSONAL COACHING AND LEADERSHIP FOR HUMAN DEVELOPMENT
Author:
Cerbeleón Murillo Ruiz
Year: 2015
cermurilloruiz@yahoo.com
cermurilloruiz1@gmail.com
SUMMARY
This article has as its fundamental purpose, explain the importance of
coaching as an art or discipline for the enrichment and strengthening of human
potential, and that through the use of personal leadership, understood as the
ability of a person to responsibly manage their development staff, allows you
to make better decisions to improve their performance to and achieve goals. It
also offers the coaching relationship and personal leadership taxed as
approaches to achieving human development for a better quality of life. Under
this premise assumes coaching from a holistic, integrated vision, through which
the person develops awareness on fundamental personal dimensions: Emotional,
Mental (Rational), Linguistics, Energy, body and spirit (Quantum): while
allowing the preservation and connection with personal learning space. Since
the person does not know what he can not see, coaching becomes a great stimulus
to support the self-coached allowing the coachee or enhance your strengths and
your weaknesses. In this sense, both the coach and the coaching process become
important, that because it's not enough to know the situation affecting the Coachee,
but it is necessary provide the tools to be empowering and take the center of
his life. In this same personal leadership comes great importance since it goes
hand in hand with decision making, confidence, security and assertiveness, that
is, the leadership we ourselves, because we require to take control of our life
acting with autonomy and assertiveness.
Descriptors: Coaching, comprehensive coaching, personal leadership, human
development, quality of life.
COACHING
PERSONAL Y DESARROLLO HUMANO. BASES PARA EL EQUILIBRIO EMOCIONAL
“Lo que existe detrás nuestro y lo que existe delante de
nosotros es algo insignificante comparado con lo que existe dentro de
nosotros”.
Emerson
INTRODUCCIÓN
El artículo hace referencia al coaching y al liderazgo personal;
el primero como disciplina para el fortalecimiento y enriquecimiento del poder
interno que tiene la persona, y el segundo como elemento o rasgo de importancia
que debe estar integrado a la personalidad de cada individuo en su tránsito
hacia el logro de su desarrollo. Desde aquí se construye un espacio
conversacional a través del cual el coach mediante la formulación de preguntas
poderosas, la práctica de la escucha profunda y la presencia plena, transmite
al coachee la confianza necesaria para el desarrollo de un franco proceso de
cambio el que se genera aprendizaje.
El coaching ayuda a la persona a entender e interpretar
la manera como construye su vida, permitiéndole en primera instancia conocer
cómo piensa, cómo siente y cómo se relaciona tanto con su entorno como con
otros, ello se traduce en la oportunidad de establecer una verdadera conexión
consigo mismo y con las otras personas, el conocerse a sí mismo de una manera
integral, permite saber el estado en que se encuentran nuestras raíces y la manera
como nos proyectamos y nos relacionamos con los otros.
En el ámbito del liderazgo es fundamenta rescatar el
valor y la credibilidad que para sí mismo tiene, como también por la forma en
que se percibe y es percibido por otras perdonas, para el adecuado manejo de
las relaciones interpersonales, por ello, es posible decir que bajo este
enfoque la credibilidad del líder es fundamental y configura una competencia
clave en el proceso de coaching.
Coaching
El coaching ha sido definido por diversos autores
entre los que destacan O’Connor (2005:15), quien lo concibe como “una
herramienta para ayudar a las personas a moverse en pro de desarrollar las
habilidades que desea así como encaminarse hacia la dirección que pretende,
despertando de manera congruente todo su potencial”, desde esta perspectiva el
Coaching es reconocido cada vez más en América Latina como uno de los métodos
de desarrollo más satisfactorios y eficientes para alcanzar un alto nivel
profesional y personal.
En este
sentido, el coaching contribuye a la toma de conciencia, faculta la elección y
lleva al cambio, libera el potencial de la persona para maximizar su
rendimiento, por lo tanto, el coaching
más que enseñar ayuda a aprender.
El Coaching
según Vilallonga (2005):
Es un proceso que busca el máximo
desarrollo profesional de una persona, a través de un diálogo entre el coach y el
cliente también denominado (coachee) en un contexto productivo orientado a
resultados, donde el primero guía al segundo por medio de preguntas hacia sus
objetivos, ayudándole a clarificar sus ideas y deseos. Es decir, este proceso
permite obtener información relevante para que el pupilo (coachee) esclarezca
sus próximos pasos, logrando así la construcción de un plan de acción.
De la misma forma, este autor plantea que para
realizar un coaching adecuado el coach debe tener habilidades que permitan
reconocer las competencias y fortalezas del coachee; conocer y comprobar los
objetivos que busca él; establecer las prácticas y opciones que se llevarán a cabo
y dar feedback y seguimiento al coachee. En correspondencia con este
planteamiento, (Zeus y Skiffington, 2002), sostienen que “el coach se compromete
a colaborar con el coachee para establecer y clarificar la finalidad de los
objetivos y desarrollar un plan de acción destinado a su consecución. Es decir,
el Coaching está muy relacionado con el cambio y la transformación, con la
identificación y modificación de comportamientos desadaptados o poco adecuados
y con el establecimiento de planes de acción destinados al aprendizaje de
nuevas conductas y a la aplicación de las mismas para satisfacer los objetivos
y metas personales (Colomo y Casado, 2006).
De acuerdo a lo planteado
por la Federación Internacional de Coach (2008:19), (ICF por sus siglas en
inglés), el coaching es definido como: “una relación profesional continua, que
ayuda a las personas a producir resultados extraordinarios en sus vidas,
carrera, negocios y organizaciones”
Desde esta concepción se
interpreta que a través de un proceso de coaching, el coachee puede lograr la
profundización de sus aprendizajes, la
optimización de su desempeño y el mejoramiento de su calidad de vida, lo que a
su vez está en concordancia con el proceso de desarrollo humano
En este mismo orden, Pérez
(2010:20), define el coaching como: “el arte y la disciplina de destacar,
fortalecer y enriquecer el potencial del ser humano”. En esta definición la
autora percibe al ser humano como un ser único, con sus propias características
individuales, lo que considera como una gran obra de arte única y original, es
por eso que asocia al coaching con el arte.
En relación a considerarlo
una disciplina se sustenta en que un proceso de coaching se basa en un orden,
en una metodología que ofrezca apoyo para el logro de los objetivos que se
propone el coachee, por lo que el coaching dista de ser una conversación, un
proceso al azar, por el contrario, se constituye en una disciplina que busca
fortalecer y enriquecer el potencial del ser humano, el cual en algunos casos
está adormecido o no ha sido potencializada en su máxima capacidad. En este
sentido, se reafirma que la intención del coaching es que el coacheado busque y
encuentre sus propias respuestas.
Se asume el coaching como la actividad en la que el
coach apoya al coacheado, desde la posibilidad de abrir un espacio
conversacional en el cual la persona pueda darse cuenta, abriendo posibilidades
de entrenamiento para descubrir que puede realizar cambios en sus rasgos de
comportamiento consolidando eventos conductuales, que le ayuden a modificar su
devenir en sus dominios personal y profesional logrando el descubrir el ser y
conducirse al hacer.
Coaching
Personal
El coaching personal es el arte de facilitar el
desarrollo potencial de las personas para alcanzar objetivos coherentes y
cambios en profundidad. En este proceso, el coach ayuda a las personas a
esclarecer sus metas, ya sean personales, laborales, de relaciones afectivas,
etc., y a ponerse en camino para alcanzarlas.
El coaching personal tiene como finalidad
clarificar en el coachee sus valores y visiones, así como el establecimiento de
objetivos y nuevas acciones, con el objeto que este pueda lograr desarrollar
una vida más satisfactoria, es decir, que el coaching personal trata
principalmente de contribuir con el
mejoramiento de la vida de las personas. Es por ello que para Leonard (1994),
fundador de la Federación Internacional de Coach afirma que:
Un coach personal es
tu socio en el logro de objetivos personales. Tu entrenador en herramientas
comunicacionales y de vida, que te acompaña en la generación de cambios. Sostén
incondicional de éxitos y errores. Guía en desarrollo personal. Co-diseñador en
la creación de nuevos proyectos. Aliento en tiempos tormentosos. Es quien te
despierta cuando estás dispuesto a escuchar tu propia alarma.
Coaching Integral
Un proceso de coaching integral se caracteriza por ser incluyente,
completo, total, es decir, que integra todos los aspectos de la vida del
individuo en un marco filosófico o estructura global que se asume desde las
percepciones clave del conocimiento en el mundo, lo que a su vez sintetiza e
integra las tradiciones psicológicas, filosóficas y espirituales; de allí que
el coaching desde el enfoque integral considera la visión integradora de la
totalidad del coachee y su mundo para ayudarle a ubicar en su interior nuevas
perspectivas sobre la forma de enfocar las situaciones de la vida y sobre cómo
moverse hacia delante de manera más eficaz y saludable.
El coaching visto desde este enfoque, facilita el que puedas
relacionarte contigo mismo y con los demás en forma y sin tensión con armonía y
equilibrio.
Liderazgo Personal
El liderazgo personal es un rasgo muy importante que debe formar parte
de nuestra personalidad y carácter para llevar a cabo de forma satisfactoria el
camino hacia el desarrollo personal. En este sentido, el liderazgo personal va
de la mano de la toma de decisión, la confianza, la seguridad y la asertividad,
es decir, el liderazgo de nosotros a nosotros mismos, por cuanto requerimos
tomar el control de nuestra vida actuando con autonomía.
Desde esta perspectiva, alcanzar el liderazgo personal es una condición
que está disponible para todos los seres humanos, de allí que ejecutarlo se
constituye en una de las claves para triunfar, por ello, comparto el criterio
que la mejor definición de liderazgo es la de aquel que crea otros líderes que
tratan de mejorar la imagen que otros tienen de sí mismo, lo que a su vez
conduce al desarrollo personal implicando autoconocimiento, autoestima,
autodirección y autoeficacia, lo que a su vez conlleva a una vida de bienestar personal, familiar, profesional,
laboral y social, de allí su estrecha relación con el coaching.
En este sentido, Brito (1992:112), define el desarrollo personal como:
Una experiencia
individual y grupal a través de la cual los sujetos que participan en ella,
desarrollan y optimizan habilidades y destrezas para la comunicación abierta y
directa, las relaciones interpersonales y la toma de decisiones, permitiéndole
conocer un poco más de sí mismo y de sus compañeros de grupo, para crecer y ser
más humano.
Coaching
y Liderazgo
El coaching es
una disciplina a través de la cual
se logra el máximo desarrollo personal y profesional de las personas, lo que da lugar a una
profunda transformación, generando cambios de perspectiva y aumento del compromiso
y la responsabilidad para consigo mismo y con los demás, lo que se traduce en
mejores resultados. Ello, permite concebirlo como un proceso sistemático que
facilita el aprendizaje y promueve cambios cognitivos, emocionales y
conductuales que incrementan la capacidad de acción en función del logro de las
metas propuestas.
Desde
esta perspectiva, se entiende el coaching como una disciplina emergente que
trabaja en la facilitación de los procesos de desarrollo de las personas: en la
evolución profesional, en los tránsitos de la carrera laboral, en el logro de
objetivos, en la disolución de obstáculos para el crecimiento personal y en la
búsqueda del mejoramiento de los niveles de rendimiento.
Thomas
Leonard (1999), asume al coach desde una visión integral, con un importantísimo
rol en la relación con el coachee cuando afirma que:
Un coach es tu socio
en el logro de objetivos personales. Tu entrenador en herramientas
comunicacionales y de vida, que te acompaña en la generación de cambios. Sostén
incondicional de éxitos y errores. Guía en desarrollo personal. Co-diseñador en
la creación de nuevos proyectos. Aliento en tiempos tormentosos. Es quien te
despierta cuando estás dispuesto a escuchar tu propia alarma.
Desde esta visión el coaching es fundamental para el desarrollo de un
líder. El líder aprende a pensar y a actuar en grande. Y esto puede generar una
gran satisfacción: tener mayores responsabilidades, liderando desde el ejemplo
y caminando por la existencia teniendo conciencia que su valor personal genera
impacto.
El coaching genera
una visión poderosa con el liderazgo. Cuando un líder provee coaching, permite
que sus colaboradores tengan una relación fuerte con él. Un líder coach
acompaña a las personas en el proceso de desarrollo empresarial, profesional y
personal. Este se constituye en un ejercicio desde una preparación académica
sólida para desarrollar nuevas competencias.
Un líder es alguien que comparte
contigo su visión sin importarle que tú no puedas verla, que te muestre cómo se
ve su sueño y que te dé argumentos para seguirlo. Es por ello, que el concepto
de coach es inseparable del concepto de liderazgo, puesto que el líder debe ser
siempre un coach. En el coaching personal se trabajan aspectos muy importantes
que requieren toda la atención del coach para despertar el interés en el
coachee, de manera que sienta la necesidad de buscar desde lo más íntimo de sí
las respuestas a las situaciones que considera le están afectando o a las
necesidades que desea satisfacer. Es por ello, que se aboga por la práctica de
un liderazgo de transformación, enfocado en el cambio personal.
De lo anterior se desprende que el
coach en un proceso de coaching debe poner en práctica el desarrollo de un
liderazgo que le permita lograr en el coachee la aplicación de un liderazgo
para consigo mismo, y es a lo que llamó Pittaluga (2013:97), liderazgo
Resiliente, en el cual define al líder como: “aquella persona que logra para sí
misma y consigo mismo aquello que está llamado a promover en los demás, dadas
las exigencias de sus tiempos”.
El líder resiliente brinda apoyo a las
demás personas para que transite el mismo camino de crecimiento personal y de
manera auténtica puedan subirse sobre sus propios hombros a fin de lograr
equilibrio emocional, así como soluciones eficaces y efectivas a los problemas
y situaciones que se le presenten.
Desarrollo Humano
Para Amartya Sen, (1995),
“el desarrollo humano, como enfoque, se ocupa de lo que considera la idea
básica de desarrollo: concretamente, el aumento de la riqueza de la vida humana
en lugar de la riqueza de la economía en la que los seres humanos viven, que es
sólo una parte de la vida misma”. El Desarrollo
Humano es un paradigma de desarrollo que va mucho más allá del aumento o la
disminución de los ingresos de un país. Comprende la creación de un entorno en
el que las personas puedan desarrollar su máximo potencial y llevar adelante
una vida productiva y creativa de acuerdo con sus necesidades e intereses. Las
personas son la verdadera riqueza de las naciones. Por lo tanto, el desarrollo
implica ampliar las oportunidades para que cada persona pueda vivir una vida
que valore.
El
Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), define el desarrollo
humano como:
Un proceso en el cual se amplían las oportunidades del ser
humano. En principio estas oportunidades pueden ser infinitas y cambiar con el
tiempo. Sin embargo a todos los niveles del desarrollo, las tres más esenciales
son disfrutar de una vida prolongada y saludable, adquirir conocimientos y
tener acceso a los recursos necesarios para lograr un nivel de vida decente. Si
no se poseen estas oportunidades esenciales muchas otras alternativas continúan
siendo inaccesibles
En
cuanto al concepto desarrollo, Maier (1969) diferencia el crecimiento orgánico
de desarrollo del desarrollo "humano" propiamente tal, que lo
relaciona con el desarrollo socio-psicológico y lo define como la
"integración de los cambios constitucionales v aprendidos que conforman la
personalidad en constante desarrollo de un individuo "; especificando que,
"el desarrollo es un proceso." el cambio es un producto ".
Por
su parte Good y Brophy (1996), consideran que desarrollo "es una
progresión ordenada o niveles cada vez más altos tantos de diferenciación como
de integración de los componentes de un sistema”. Craig (1997:29) plantea que
desarrollo son los "cambios temporales que se operan en la estructura,
pensamiento o comportamiento de la persona y que se deben a factores biológicos
y ambientales”.
Al
referirse a los procesos biológicos este autor considera la maduración, el
crecimiento hasta alcanzar la madurez y el envejecimiento: en cuanto a lo
segundo, se puede interpretar que lo ambiental es lo "cultural", por
tanto se infiere que hace referencia a procesos psicológicos puesto que esta
última es producto del quehacer del hombre y es la que determina las
condiciones y calidad de vida en la que desarrolla el ser humano.
En
el mismo sentido, Sullivan (1983:6), sostiene que el desarrollo “es el producto
de la continua interacción entre diversos factores estimulantes y una matriz de
crecimiento prevalecientemente compuesta por ciertas predisposiciones
selectivas, tanto para experimentar el cambio como para responder al ambiente
de determinadas maneras”.
Desarrollo Humano desde la Persona
El desarrollo humano
es un proceso de descubrimiento, de crecimiento, de humanización, de conquista
de la libertad; representa el esfuerzo de los hombres y las mujeres por
conquistarse a sí mismos a través de la iluminación de la inteligencia y el
fortalecimiento de la voluntad. Expresa un perfil de hombre que representa
convicciones y creencias funcionales a un ideal de sociedad, y que integra la
conducta colectiva, el comportamiento humano social y de valores deseables.
Un desarrollo humano integral, finalmente, debe cubrir
todas las posibilidades de crecimiento y mejoramiento de la calidad de vida de
las personas. En este sentido, Maggi (2000:20), identifica seis dimensiones
claves para que, a través de su desarrollo y sano equilibrio, cada persona
logre una vida más plena, completa y feliz. Estas dimensiones son: “bienestar
físico, familia y pareja, desarrollo profesional, aspectos culturales y de
educación, desarrollo social, bienestar emocional y trascendencia”.
Desde esta perspectiva, el desarrollo humano es el
trabajo que toda persona realiza consigo misma – a partir del proceso de darse
cuenta - para despertar la capacidad que tiene, de ser feliz y lograr cosas
para su beneficio y el de los demás, por ello se constituye en el camino que
las personas recorren para desarrollar sus capacidades, quererse a sí mismos y
establecer relaciones saludables para los demás.
Esta concepción del desarrollo humano trasciende los
indicadores economicista entre los que destacan el Producto Interno Bruto
(PIB), los Indicadores de Distribución de la Riqueza, Índice de logro Educativo
(ILE), Índice de Esperanza de Vida (IEV), Índice de Nivel de Vida (INV), entre
otros; volcando la atención en una serie de elementos que se constituyen en los
indicadores del desarrollo humano desde la persona, entre los que cobra
muchísima importancia el liderazgo, la autoestima, comunicación efectiva o asertiva,
toma de decisiones y motivación; cuando estos aspectos son trabajados, las
personas pueden lograr seguridad, equilibrio emocional y por consiguiente el
fortalecimiento de su crecimiento personal.
Consideraciones
Finales
El propósito del coaching en tanto disciplina es ayudar a
la persona a ver y darse cuenta de aquello que está entorpeciendo su mejor
juicio en pro de un desempeño adecuado de sus relaciones, lo que en cierta
forma ralentiza sus decisiones; sin embargo, más allá de ayudar a verlo, a
descubrirlo, es importante brindarle el acompañamiento necesario en el proceso
de aprendizaje requerido para el logro de resultados en corto tiempo. En este
sentido, tanto el coach como el proceso de coaching adquieren gran importancia,
ello debido a que no es suficiente conocer la situación que afecta al cochee,
sino que es necesario brindarle las herramientas para que se empodere y tome el
centro de su vida.
Desde esta perspectiva, el coach debe actuar con
imparcialidad, con habilidades para escuchar y hacer preguntas que generen en
el coachee inquietudes y reflexiones que le permitan mirar su problemática y
alinear la visión de forma tal que pueda diferenciar lo que quisiera hacer de
lo que está haciendo; y en un sentido más profundo romper sus propios
paradigmas,
Es bastante significativo que miremos a otros argumentos
de vida, otras posiciones diferentes a las que adoptamos de manera cotidiana,
atendiendo a que muchas veces no nos damos el permiso de transitar nuevos
caminos, asumir otras opciones, aprender a hacer las cosas y a tomar decisiones
que ni siquiera habíamos considerado, es decir, debemos salir de nuestra zona
de comodidad o como algunos la llaman, nuestra zona confort; ello en
correspondencia con una frase que se le atribuye a Albert Einstein “si buscas
resultados distintos, no hagas siempre lo mismo, la reflexión en torno a esta
significativa frase, debe conducir al coachee a la comprensión de su compromiso
personal y a ser consciente de las desafíos que supone la vida cotidiana.
En este sentido, a través del desarrollo del proceso de
coaching, el coach puede lograr que el coachee se libere de sus miedos;
fortalezca el concepto de si mismo, conozca su propio poder y de la fuerza
interna que posee y que lo puede llevar a actuar y a ser lo que quiere ser; por
ello el coach aconseja, guía y estimula al coachee, a quien se dirige el
proceso de aprendizaje para que vaya más allá de sus limitaciones de forma tal
que pueda realizar su potencial plenamente. Las personas necesitan además de
estrategias de poder, habilidades para la comunicación y actitudes positivas,
nuevas y efectivas actividades que conlleven a la permanente renovación las
cuales deben estar relacionadas con la capacidad de adaptación al cambio, en
donde el liderazgo personal adquiere gran relevancia.
A través del coaching integral es posible tomar
conciencia de los pasos a dar con el fin de mejorar cada dimensión de ti para
de esa manera encontrar el beneficio que proporciona la experiencia de vivir
cada paso. es por ello, que el coaching y el liderazgo personal se constituyen
en las fuentes para el logro de una mejor calidad de vida enmarcada en una
mejor y más efectiva relaciones interpersonales.
REFERENCIAS
Sen, A.
(1995). Nuevo examen de la desigualdad. Alianza Editorial, Madrid
Brito,
Challa (1992). Relaciones Humanas.
Colomo,
R. y Casado, C. (2006).Mentoring and Coaching. Its Perspective. Journal of Technology Management and Innovation, 1 (3).
131-139.
Federation International de Coaching. (2008).
Advancing The are Science and practice of professional coaching.
Good, T. L., Brophy, J. E. (1990). Educational
psychology: A realistic approach. (4th ed.).White Plains, NY: Longman
Maggi,
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O’Connor.
J. (2005). Manual de Coaching
Pérez,
M. (2010). El Arte de ser Coach y algo más…México: Editorial Trillas.
Pittaluga,
C. (2013). Liderazgo Resiliente. La Innovación en Entornos Adversos. Venezuela:
Galac
Vilallonga,
M. (2005). Cómo reconocer un Coaching de Calidad. Executiva Excellence. La
revista de Liderazgo, la Gestión y la Toma de Decisiones. 25, 15.
Zeus,
P. y Skiffington, S. (2002). Guía Completa de Coaching en el Trabajo. Madrid:
McGraw – Hill.